CÓMO COORDINAR TERAPÉUTICAMENTE UN CASO DESDE UNA INTERVENCIÓN MULTIDISCIPLINAR

Cada vez es más común que a nuestra consulta lleguen casos que deben ser abordados desde una perspectiva multidimensional. Aprender a detectar, enfocar y coordinar la intervención es imprescindible para conseguir una mejora en el paciente mucho más efectiva.

¿Qué es una intervención multidisciplinar?

Si bien se puede entender que normalmente hablamos de la intervención en un caso a través del trabajo de varios especialistas de distintos, en este caso lo abordamos desde el trabajo de varios profesionales de la psicología pero con distintas especialidades o ramas.
Cuando un caso llega a la consulta, es imprescindible detectar si es necesaria una intervención desde un profesional único, desde varios profesionales o si es susceptible de comenzar de una forma y luego se pueda segmentar la demanda y cubrirse de forma complementaria e integral por varias especialidades.
Pondremos un ejemplo: puede que nos llame un paciente buscando terapia de pareja, al inicio detectamos que no solo es necesaria la terapia de pareja sino que también existe una necesidad individual de trabajo para ambos miembros. En ocasiones, al comunicarse, lo pueden recibir como algo lógico que incluso habían contemplado antes, pero también puede ser que no estén preparados para ello o que incluso ni siquiera se lo planteen o lo acepten.
En este caso la necesidad sí es susceptible de ser abordada de forma multidisciplinar pero, al no estar preparados para ello, quedará dormitando hasta que identifiquemos el momento terapéutico de ofrecerles esta opción.

¿Cómo se sabe si se necesita más de una especialidad?

Esto, por supuesto, tendrá un gran peso en la habilidad de escucha y en el ojo clínico entrenado del profesional, no obstante os dejamos algunos tips que nosotros utilizamos para formar a nuestros directores de centro Syndeo para que les ayuden a distinguir:

  1. Escucha todo lo que te dicen, pon atención a la información contextual y complementaria.
  2. No busques únicamente el motivo de demanda, puedes profundizar un poco en él pero tiene mucho más valor lo que comunica y los pequeños detalles que te ofrece.
  3. Haz preguntas por todas las áreas vitales del paciente de forma resumida.
  4. Pregunta directamente al paciente si sabe qué busca o le puedes asesorar o informar. Hay perfiles que ya lo tienen muy claro y otros que no, pero su predisposición a la escucha te ofrece conocimiento sobre su apertura.
  5. Háblale del enfoque multidisciplinar, puede que conecte con ello en ese momento. Si no lo hace no pasa nada, la información sobre tu forma de trabajo le vendrá bien.

    ¿Qué hacer ante un caso que necesita enfoque multidisciplinar?

En este momento en el que el profesional de referencia detecta que se necesita una intervención con varios profesionales, pueden darse varias situaciones:

  • Si el paciente/s conectan con la necesidad y reciben nuestro ofrecimiento como una opción viable: en este caso se debe poner el marcha el mecanismo de coordinación interna del caso que te explicamos en el siguiente apartado de forma más pormenorizada.
  • Si el paciente/s no está preparado para recibir la opción multidisciplinar o entendemos que por ahora es contraproducente ofrecérselo: acoger la demanda y trabajar la figura del psicólogo de referencia con especial atención y cuidado. Informar a los compañeros para que estén al tanto, también de forma periódica para que puedan hacer observaciones o indicaciones. Si lo vemos oportuno, podemos comunicar al paciente que queremos consultar alguna cuestión con nuestros compañeros (así podemos ir introduciendo de forma natural sus figuras). Hay que ser especialmente cuidadoso en anotar la información relevante de cada sesión, no sólo las notas, para que, llegado el momento, los compañeros tengan acceso a ello.
  • Si el paciente/s no está en línea en ese momento con nuestra visión y declina la opción de forma permanente. En este caso, manteniendo el anonimato, podemos ir compartiendo la información del caso con los compañeros especialistas que creamos nos pueden ayudar, principalmente para tener una visión lo más completa posible, puede que, llegado el caso, tengamos que hacer una derivación completa si nuestro trabajo ha finalizado y vemos que necesita la intervención de otro compi.

Consejos para coordinar un caso:

1. Realiza un documento que contenga la siguiente información, os servirá como guía pero también es imprescindible que el paciente pueda leerlo y entenderlo:

a. Descripción del modelo de trabajo y contextualización del enfoque
b. Apartado de especialidad (uno por cada especialista que intervenga):
      i. Evaluación
     ii. Recomendación o propuesta de trabajo
     iii. Condicionantes y justificación
c. Recomendaciones generales
d. Presupuesto y temporalidad de sesiones
e. Información formal del trabajo (número de contacto, procedimiento, etc).

2. Genera un calendario de seguimientos y sesiones clínicas formales, no lo dejes como algo informal, el compromiso es vital.
3. Estructura un documento de trabajo en el que se vayan compartiendo los hitos e información relevante del caso.
4. Cuida especialmente las herramientas que se utilizan en consulta para que no se dupliquen, es importantísimo que el paciente tenga la sensación de que el equipo de profesionales está totalmente informado.
5. Genera informes de seguimiento cada 2 meses, puedes buscar la temporalidad que se necesite. Esto es especialmente recomendable en el caso de menores para informar a los progenitores, si va acompañado de una reunión mucho mejor.
6. Siempre debe haber un profesional coordinador de referencia, lo ideal es que pueda ser una personal que no realice terapia directa, y que mantenga la visión objetiva del caso para aterrizar las necesidades reales.


Siempre, si lo necesitas, puedes buscar un compañero que supervise tu intervención y te acompañe en el caso. Acompañado siempre se trabaja mejor.

 

 

Inma Aldea 

Syndeo