Estigmatización del VIH/Sida: aspectos psicosociales más importantes

 

En primer lugar, cabe remarcar que el VIH/Sida es una enfermedad que no sólo afecta a nivel neurológico (Catro et al., 2011), sino que también entran en juego determinados aspectos psicológicos, físicos y sociales; dicho de otra forma, el impacto psicosocial sobre las personas afectadas por VIH/Sida es muy fuerte (Moos y Tsu, 1977).

ESTIGMA E IMPACTO PSICOSOCIAL EN LAS PERSONAS AFECTADAS

De hecho, muchos estudios hablan sobre un impacto psicosocial negativo, que puede influir de forma negativa en la conducta y la cognición. Entre otras cosas, se ven alteraciones en los rasgos de personalidad, y estados de ánimo catastrofistas rodeados de un profundo malestar psicológico (Chida y Vedhara, 2009). Aún así, pueden hablarse de múltiples factores psicosociales que afectan. A nivel conductual, por ejemplo, pueden caerse en conductas adictivas como el consumo de cannabis, así como utilizar estrategias de afrontamiento perjudiciales para su bienestar psíquico y físico. Por otro lado, y especialmente al inicio del diagnóstico, las personas con sida suelen presentar una desregulación de sus emociones (Cantú et al., 2012).

Respecto a los aspectos psicosociales, otro factor determinante es el del rechazo social. Este rechazo puede producirse por gran parte de la sociedad, incluyendo la familia (Jeremy et al., 2005; Coscia et al., 2011). Como dicen Cantú et al. (2012), frente a este factor de riesgo, el apoyo social se convierte en un aspecto esencial que debe encontrarse en el tratamiento del VIH/sida. Sin embargo, también resulta interesante trabajar el estigma que existe sobre la enfermedad para conseguir reducir o suprimir este rechazo por parte de la sociedad.

APOYO DE LOS PROFESIONALES SANITARIOS EN PERSONAS CON VIH/SIDA

A raíz de esta afirmación sobre la importancia del apoyo social, surge el debate sobre la importancia del soporte profesional sanitario; Cantú et al. (2012) corroboran que el apoyo profesional se ha convertido en una de las estrategias más beneficiosas para la gente afecta. Sin embargo, a pesar de que las personas con VIH presentan una buena comunicación con los médicos y enfermeros, se comunican muy poco con otros sanitarios, como es el caso de los psicólogos (Cantú y Alvárez, 2009). Por tanto, una implicación futura en este ámbito es la de promover tratamiento psicológico para este tipo de pacientes. De hecho, Naude y Pretorius (2003), reportan que aquellos programas puramente psicológicos y sociales también incrementan el bienestar en las personas con VIH/sida.

EVIDENCIA CIENTÍFICA SOBRE LOS PROGRAMAS DE INTERVENCIÓN PARA PERSONAS CON VIH/SIDA

En cuanto al nivel de evidencia sobre los programas de intervención, cabe remarcar que hoy en día existen muchos programas que se encargan de prevenir el sida. En el caso de España, Fernández et al. (1999) la mayoría de comunidades autónomas presentan, al menos, un programa de prevención. El problema, más que el número de programas que existen, se encuentra en su calidad. A pesar de que se pueden encontrar numerosos artículos y documentos científicos al respecto, muchos presentan problemas en su efectividad o no presentan la suficiente calidad. Por tanto, es necesario seguir mejorando en los aspectos relacionados con las intervenciones sobre el VIH/sida, así como replicarlas para asegurarse de que funcionan en diferentes contextos.

Siguiendo la misma línea, resulta interesante hablar sobre algunos estudios que hablan sobre la efectividad de realizar los programas con iguales, puesto que se aportan datos interesantes. De hecho, estos estudios confirman que las intervenciones realizadas con iguales pueden llegar a ser más efectivas que las que llevan a cabo los propios profesores (Fernández et al., 1999; Bandura, 1990; Senderowitz, 1997).

Por ejemplo, Achiong y Achiong (2011) implantaron su programa con promotores pars, con estudiantes de la universidad, demostrando que, durante el programa, los sujetos presentaban una gran motivación y una participación activa. Sin embargo, estos estudios se han centrado en población joven, por lo que debería estudiarse si se produce la misma efectiva con poblaciones de edades distintas.