El impacto de una sonrisa
¿Sonreír realmente puede cambiar nuestro estado emocional?
Lo que dice la evidencia científica frente a una de las ideas más populares en psicología aplicada.
Hubo un estudio científico* del año 1988 que así lo afirmaba. Se hizo muy popular y todavía hoy hay
prestigiosos ponentes internacionales que aluden a él en sus conferencias. Es un ejercicio que es fácil
replicar con el público (tan solo poner un lápiz o bolígrafo entre los dientes puede cambiar la
emoción que sientes), y que puede resultar divertido para hacer delante de una audiencia que
efectivamente se ríe al hacerlo. De ahí, este conocimiento se extiende con facilidad, es replicado por
otras personas y pasa a ser un conocimiento aceptado.
Sin embargo, un problema severo con el que cuenta la psicología experimental hoy en día es que
muchos estudios científicos que se han hecho populares no son replicables, poniendo así en duda los
resultados hallados en la investigación original. Es lo que se encontró en una investigación que puso
en jaque a la psicología científica encontrando que casi el 70% de 100 famosas investigaciones
publicadas en revistas punteras en psicología encontraban unos resultados diferentes (menores) a los
publicados en dichas revistas.

¿Qué hay entonces del ejercicio del “lápiz entre los dientes”?
El famoso ejercicio del “lápiz entre los dientes” no soportó el peso de los intentos científico de
replicarlo que evidenciaban unos resultados mucho menos significativos y atribuibles a otras
variables (como por ejemplo “saber que te están observando con un lápiz entre los dientes”). En
conclusión, quien haga una revisión científica más amplia y actualizada llegará a la conclusión de que
forzar una sonrisa sin una emoción que la genere, o un contexto que la justifique, no cambia el
estado emocional de forma consistente y prolongada.
¿Sonreír nos hace más felices?
Una sonrisa no crea felicidad de la nada, pero puede inclinar la balanza emocional hacia lo positivo,
sobre todo si hay algo que la apoye. La ciencia estudia el funcionamiento de las neuronas espejo**.
De una manera resumida, nuestras emociones tienden a copiar las emociones que vemos delante.
Por ese motivo, si estamos delante de alguien muy alterado, nervioso, que habla fuerte, tendemos a
alterarnos y ponernos nerviosos. Entonces, si estamos junto a una persona que sonríe con frecuencia,
y además hay una causa observable para esa sonrisa, nos va a contagiar esa emoción positiva que nos
hará sonreír. A su vez, nuestra sonrisa impactará en las neuronas espejo de esa persona que
favorecerá su sonrisa. Es un círculo vicioso positivo que emplean habitualmente los maestros en la
escuela, los dependientes para lograr una respuesta mejor de sus clientes, o incluso
¿Qué impacto tiene la sonrisa en nuestras relaciones sociales y en la percepción que otros tienen de nosotros?
La sonrisa forma parte de la comunicación. En este caso, de la conocida como comunicación no
verbal. Es uno de los gestos más poderosos que tenemos a nivel social que puede determinar de una
manera poderosa cómo nos perciben y cómo nos van a tratar. Cuando sonríes, envías un mensaje
silencioso que dice: “estoy abierto a ti, puedes confiar en mí”. … Para esto, la sonrisa tiene que ser honesta
y no impostada.
¿Cómo se ve afectada nuestra capacidad de sonreír (genuinamente) cuando estamos en ansiedad o estrés?
La sonrisa auténtica nace de una emoción interna… El lenguaje no verbal que muestra saturación y agotamiento
cubre hasta ocultar cualquier otro gesto de felicidad.
Director del centro de psicología Calma Al Mar · Presidente de la AEPSIS
Referencias
- Strack, F., Martin, L. L., & Stepper, S. (1988). Inhibiting and Facilitating Conditions of the Human Smile… Journal of Personality and Social Psychology.
- Rizzolatti, G., & Craighero, L. (2004). The mirror-neuron system. Annual Review of Neuroscience, 27, 169–192.

