¿TENGO QUE IR A UN PSICÓLOGO O A UN COACH?

Si tienes, has tenido o quieres tener contacto con la psicología, el preguntarse qué diferencia a un psicólogo de un coach es muy frecuente. Por tanto, definamos conceptos:

¿Qué es el coaching? La palabra coach viene del inglés y significa “entrenador”, el objetivo de un coach es ayudar o acompañar a su cliente mediante el uso de técnicas en la consecución de metas y proyectos, haciendo de guía y motivación en todos aquellos retos que, de una forma u otra, las personas por sí mismas no han logrado conseguir. El coaching es una buena opción cuando te sientes bien, pero no sabes cómo llevar acabo tus objetivos. Éste se centra en el presente y en cómo usar las herramientas individuales de cada persona de la manera más eficiente y beneficiosa. Pero, ¿y si yo no cuento con las herramientas suficientes, o no creo en ellas? ¿Y si la razón de que yo no consiga llevar a cabo mis objetivos no es por mis capacidades o mi motivación?

El negocio del coaching ha emergido con fuerza en la manera de resolver los problemas, y los psicólogos nos hemos visto envueltos, cuestionados por amigos y pacientes que no entienden cómo no se nos ha ocurrido antes esta forma de hacer terapia tan eficiente. Este tema me parece interesantísimo, no por el hecho de lo atractivo y positivo que resulta este negocio en sí contra lo negativo que resulta ir al psicólogo, si no por el hecho de encontrar aquellas diferencias con el trabajo de este último.

En los últimos años ha aumentado muchísimo el número de personas que se dedican a dar servicios de coach, entre ellos gente sin titulación o con muy baja formación que ofrece un servicio, evidentemente bajo o de poca calidad, que puede dañar enormemente a un paciente. Dejando atrás la falta de desconocimiento de estas personas sin preparación que ejercen o el intrusismo debido a que personas tituladas en cualquier disciplina, ya sea derecho, economía, o bellas artes, puedan ser coach, sin conocimientos previos sobre la mente, las emociones, la autoestima y un largo etcétera, busquemos realmente las diferencias entre uno y otro:

-“El coaching es de igual a igual, no como la psicología que es de experto a paciente”

El coach debe guiar con sus preguntas, influir y dirigir en la conversación haciendo de líder, y no podemos hablar de que éste sea igual a un seguidor. El líder tiene diferente estatus y es quien lleva la voz cantante en la conversación, de la misma forma que debería hacer un coach. Además de cobrar por sus servicios. Por tanto, considerar a un coach como un igual es, cuanto menos, sarcasmo.

-“El coaching se centra en el futuro y la psicología en el pasado”

De la misma forma, esto depende de qué enfoque psicológico se quiera realizar, no se centra en lo mismo el enfoque humanista, que el psicoanalista que el cognitivo-conductual. Y el psicólogo es capaz de adaptarse al momento requerido por el paciente.

-“El coaching es un método novedoso y exclusivo”

No es ni novedoso ni exclusivo, pues hace ya más de medio siglo que se llevan utilizando técnicas psicológicas centradas en los métodos de diálogo y debate como por ejemplo la Terapia Emotivo-Conductal de Ellis, el enfoque humanista de Rogers, o  como la terapia breve de Palo Alto.

-“En el coaching no se dice al cliente lo que tiene que hacer”

Tampoco es propio de ello la psicología, dependiendo de la técnica que se escoja las hay más o menos directivas. Un buen psicólogo nunca te va a decir “tienes que” siempre te hablará de “deberías”.

-“El coaching es para gente que no tiene serios problemas mentales sino para gente con problemas en su vida cotidiana”

¿Es que acaso una fobia o un trastorno obsesivo compulsivo no son igual de serios que las discusiones diarias con una pareja o las broncas incansables con un hijo adolescente? ¿No merecen ser tratados con la misma seriedad? Es erróneo pensar que un psicólogo no va a tratar o no puede tratar estos problemas de la vida cotidiana. Tanto el psicólogo como el coach pueden tratar problemas cotidianos, pero este último no puede tratar problemas mentales y un psicólogo sí.

-“El coaching es más barato y más accesible”

El coaching no tiene un colegio profesional que garantice su buena praxis, pudiendo aplicar tarifas desmesuradas y llegando a cobrar por sesión cuatro o cinco veces más de lo que cobra un psicólogo,  además de que estas tarifas no se corresponden ni con la preparación del coach ni con la calidad del servicio. Por tanto, es recomendable mirar siempre distintas opciones y no pensar que siempre lo más caro es lo mejor, y de la misma forma pensar que, al ser diferente el coach del psicólogo,  no importa que los precios sean menores.

Por lo tanto, si buscas un servicio de calidad, que además se adapte a tus necesidades y objetivos, es preferible que contactes con un profesional de la psicología que además tenga conocimientos de coach.

Si buscas ayuda porque te sientes desorientado, puedes pedir cita y nuestros psicólogos tratarán de ayudarte en lo que necesites.

María López-Fando Galdón/ marietalfg@gmail.com