La comunicación asertiva: defiendo mis derecho, mientras respeto los tuyos

Estilos comunicativos

Cuando nos comunicamos con otras personas lo podemos hacer de tres formas:

  • Estilo Pasivo: se centra en los derechos del otro y no tiene en cuenta ni defiende los suyos propios. Únicamente piensa en el otro. Tienden a evitar expresar sus opiniones, deseos o emociones. Se reprimen constantemente en presencia de otras personas. Asimismo, aceptan cualquier petición, aunque no quieran; son incapaces de decir “no” puesto que les genera sentimientos de culpa. Su tono de voz es mucho más bajo y lento. Tienen a evitar en contacto visual. Este estilo es propio de personas con baja autoestima y una eleva inseguridad.
  • Estilo Asertivo: es el punto medio entre el estilo pasivo y el agresivo.
  • Estilo Agresivo: únicamente se tienen en cuenta los propios derechos y no se respetan en absoluto los del otro. Es decir, sólo piensa en sí mismo y no empatizan con el resto. Su tono de voz es mucho más intenso, elevado y rápido, denotando cierta hostilidad. Tienden a mirar fijamente cuando se comunican. Este estilo es más propio de personas con tendencia a la violencia.

Por último, podríamos incluir un cuarto estilo:

  • Estilo pasivo-agresivo: se expresan sentimientos negativos (agresividad, hostilidad, ira…) de forma indirecta. Por tanto, no se expresan abiertamente, sino que, aparentemente expresan algo distinto a lo que verdaderamente piensan o sienten. Sienten hostilidad, pero esconden sus verdaderas intenciones.

¿Qué es la asertividad?

La asertividad es la habilidad (social) de expresar lo que uno piensa, siente o quiere de forma clara y directa. Se defienden los propios derechos, respetando a la vez los de los demás. Se trata de una comunicación abierta y respetuosa. Este estilo de comunicación es propio de personas seguras de sí mismas.

Capacidades de una persona asertiva:

  • No tiene miedo a decir que NO, ni se siente culpable al hacerlo
  • No tiene miedo de expresar su opinión o lo que piensa, así como lo que siente
  • Exige ser respetado al mismo tiempo que respeta a los demás
  • Su tono de voz es neutro
  • No tiene problemas a la hora de comunicarse, lo hace abiertamente, siempre escuchando a la persona con la que habla
  • Comunicación no verbal efectiva
  • Acepta críticas constructivas y es capaz de hacerlas respetuosamente

Derechos asertivos

Todos y cada uno de nosotros tenemos ciertos derechos a favor de nuestras propias necesidades y preferencias.

Tengo derecho a…

  • ser respetado y tratado/a con dignidad
  • tener y dar mi propia opinión
  • expresar como me siento
  • pedir ayuda y apoyo
  • a decir NO sin sentirme culpable por ello
  • decidir por mí mismo/a
  • mostrarme tal y como soy
  • pensar en mí y en lo que necesito
  • equivocarme y cometer errores
  • no justificarme ante los demás
  • cambiar lo que no me satisface
  • no responsabilizarme de problemas ajenos
  • no anticiparme a los deseos y necesidades de los demás y no tener que intuirlos

¿Por qué ser asertivo? Beneficios de ser asertivo

  • Favorece la confianza y la seguridad en uno mismo
  • Promociona la autoestima
  • Es una forma de hacerse valer
  • Favorece la inteligencia emocional
  • Mejora la comunicación y la escucha activa
  • Facilita el desarrollo de relaciones sanas
  • Favorece el respeto mutuo y la empatía

Entrenamiento de la asertividad

Todos hemos podido mostrar característica asociadas a todos los estilos comunicativos. Sin embargo, solemos tender a adoptar uno ellos en la mayor parte de las ocasiones. A pesar de que haya cierta estabilidad, no quiere decir que no se pueda cambiar y desarrollar un estilo asertivo. La asertividad es una habilidad que se puede entrenar. ¿Cómo? Lo primero es que identifiques que estilo tienes actualmente: ¿Tiendes a reprimir lo que piensas y lo que sientes? O, en cambio, ¿tiendes a expresar tu opinión y deseos, sin escuchar al resto?

Si consideras que actualmente tiendes a comunicarte de forma pasiva, es importante que pruebes a rechazar peticiones o que practiques lo que vas a decir antes de decírselo directamente a la persona implicada.

Si por el contrario tiendes a comunicarte de forma agresiva u hostil, trata de pararte a escuchar al otro. La empatía es esencial a la hora de reconocer y respectar los derechos del resto.

En cualquier caso, es fundamental aprender a controlar las emociones, ya que quien muestra un estilo pasivo se dejará llevar por los nervios y quien tiene un estilo agresivo se dejará llevar por sus intereses y la ira.

Desarrollar un estilo asertivo requiere práctica y tiempo, pero el esfuerzo merece la pena. Es mucho más beneficioso comunicarse de esta manera, así que ¡anímate! Y prueba a practicar esta forma de comunicarse.